Saber comunicarnos es esencial en nuestro día a día. Ya sea en nuestro empleado, así como en nuestra vida personal, ser capaces de expresarnos abiertamente es esencial si queremos que los demás entiendan los mensajes que les queremos transmitir y nuestras relaciones sean mucho más sanas. Esta efectividad en el acto de comunicación se consigue mediante la conocida comunicación asertiva.
¿Qué es la comunicación asertiva?
Se define comunicación asertiva como aquel acto de comunicación en el que se exponen opiniones o se realizan comentarios de forma respetuosa, sin ofender y evitando cualquier posibilidad de generar conflictos. Así pues, esta comunicación es honesta, sincera y directa, pero contemplando las emociones y las necesidades de los interlocutores.
Características de la comunicación asertiva
Para que un acto de comunicación pueda ser considerado como asertivo, hay una serie de requisitos o de características que este debe tener:
- La educación y la honestidad son esenciales.
- Los reproches personales deben ser evitados.
- Las palabras hirientes o que desacrediten a alguien deben ser evitadas.
- Se busca un equilibrio entre manifestar una opinión y dañar a los interlocutores.
- Uso de palabras adecuadas y registro. La entonación debe ser suave.
- Se trata de una comunicación activa, por lo que es necesario dejar que los demás se expresen y respetar el turno de palabra.
Todas estas características forman parte de la comunicación asertiva; esta no puede existir si hay malas o segundas intenciones. Del mismo modo, este acto de comunicación será fallido si los interlocutores no se respetan el turno de palabra, no son sinceros o bien si emplean palabras que puedan dañar a los demás.
Técnicas para mantener una conversación asertiva
Como sucede con todo, la comunicación asertiva se basa en una serie de técnicas para que esta sea afectiva y pueda ser dominada como habilidad blanda para aquellos que deseen aprender a expresarse adecuadamente. Algunas de las técnicas de la comunicación asertiva son las siguientes:
Escucha activa
No podemos conseguir un acto de comunicación completo y efectivo si no hay escucha activa. Este concepto se refiere a la necesidad de escuchar a los demás prestando atención al mensaje que nos quieren transmitir.
Uso de primera persona
El uso de primera persona es esencial en la comunicación asertiva, ya que permite transmitir los mensajes evitando culpar a los demás. Así mismo, también nos hace más responsables de nuestros propios actos.
Argumentar en lugar de exigir
Si hay algo que premia en la comunicación asertiva es que el objetivo se centra en la argumentación y no en la exigencia. De este modo, los interlocutores están dispuestos a dar y escuchar los argumentos del otro y llegar a un acuerdo sin necesidad de hacer exigencias o dar demasiadas órdenes.
No hay juicios
Los juicios y las valoraciones personales deben evitarse al máximo. No se trata de no poder dar una opinión, sino que se debe establecer una “verdad universal” por encima de las opiniones de los demás. Así mismo, la comunicación asertiva evita juzgar a cualquiera de los participantes en el acto de comunicación.
Importancia de la comunicación asertiva
Cuando empleamos este tipo de comunicación permitimos que los demás participen en ella. Además, nos permite establecer un contexto agradable en la que sea fácil dar opiniones.
Dadas sus características, este tipo de comunicación es de lo más demandada en las empresas. De hecho, dominarla se podría considerar una de las habilidades más importantes y de mayor peso a la hora de valorar a posibles candidatos para un puesto de trabajo.
Los empleados que pueden comunicarse abiertamente suelen ser aquellos con los que es más fácil trabajar. Así mismo, son empleados que saben encontrar soluciones a los problemas, además de ser ideales como líderes en los equipos de trabajo.
¿Cómo dominar la comunicación asertiva?
Como todo, dominar este tipo de comunicación es algo que requiere trabajo y dedicación. Así, lo primero que debemos hacer su queremos dominar esta comunicación es conocer cuáles son los tipos de comunicación y los registros que se emplean en ellas. Del mismo modo, debemos tener muy claras las características de este sistema de comunicación. Y, por último, se requiere de mucha práctica. Para ello, podemos practicar delante de un espejo con nosotros mismos y, posteriormente, ponerla en práctica en otros contextos como el familiar o el laboral.
Si somos capaces de mantener este tipo de comunicación de forma consciente durante un tiempo, esta acabará por convertirse en un hábito. Así, nos saldrá naturalmente y podremos evitar prepararnos las conversaciones.
La comunicación asertiva se basa en los pilares de honestidad, claridad y sinceridad. En este tipo de comunicación, el objetivo no es encontrar culpables u ofender, sino todo lo contrario: encontrar una vía de comunicación que permita escuchar activamente a los participantes, teniendo en cuenta la diversidad de opiniones y evitando toda clase de juicios o acusaciones.