Mantener a los empleados satisfechos y motivados es uno de los principales objetivos de las empresas para poder evitar su rotación y las consecuencias negativas de esta práctica, cada vez, más extendida. Por este motivo, la gestión de personal es una de las áreas en las que suelen destinar más recursos económicos.
¿Qué es la gestión de personal?
La gestión de personal hace referencia a la importancia de gestionar el capital humano de una empresa de forma eficaz y eficiente, lo que implica asegurarse de que los empleados se sientan satisfechos dentro de la organización. Para ello, son muchos los beneficios que las empresas pueden ofrecer a sus empleados, como ciertos beneficios sociales, horarios flexibles o compensaciones extraordinarias por productividad, entre otros.
Responsabilidades de la gestión de personal
La persona al cargo de la gestión de personal debe cumplir una serie de labores para que esta sea eficiente y logre los objetivos marcados:
Planificación del capital humano
El primer eslabón de una buena gestión de personal consiste en encontrar el candidato ideal para el puesto de trabajo seleccionado. Por ello, es fundamental tener en cuenta los conocimientos de los candidatos, pero también aquellas habilidades que puedan ayudarles a desarrollar sus funciones de una manera más eficaz; de este modo, no solamente se contará con el empleado adecuado, sino que su productividad será mayor y los beneficios de la empresa incrementarán.
Para encontrar al candidato adecuado, los reclutadores siguen una serie de pasos:
- Definición del perfil que se busca para cubrir un puesto de trabajo.
- Establecer qué canales se usarán durante la búsqueda de candidatos.
- Análisis de los CV recibidos y valoraciones de las habilidades personales.
- Entrevistas personales con los candidatos seleccionados.
- Selección última del candidato.
Desarrollo personal y formación dentro de la empresa
El desarrollo personal dentro de la empresa es necesario para que los empleados se sientan motivados y su productividad no decaiga con el tiempo. Por ello, los responsables de la gestión de personal deberán garantizar las herramientas adecuadas para el desarrollo de las funciones de cada puesto de trabajo, así como ofrecer formación que permita a sus empleados reciclar y adquirir nuevos conocimientos con los que crecer profesionalmente.
Evaluación del personal
La evaluación del personal es otra de las tareas que se deben llevar a cabo desde gestión de personal con el fin de analizar la consecución de objetivos, así como de realizar aquellos cambios necesarios tanto para el bienestar de los empleados como para la productividad de la empresa. De este modo, desde Recursos Humanos se establecen objetivos para cada puesto de trabajo y se analizan sus resultados. De este modo, se confirma la idoneidad de cada empleado o se establece la necesidad de buscar nuevos candidatos.
Documentación del personal: salarios, vacaciones y derechos sindicales
El cálculo de las nóminas, el salario a percibir por cada trabajador y las vacaciones, entre otra documentación, son también tareas que se desempeñan desde gestión de personal. Así, los responsables de estos departamentos deben garantizar el pago de las nóminas, establecer y organizar las vacaciones, así como asegurar que los derechos sindicales de los empleados queden cubiertos. El cumplimiento de la normativa de la empresa es otra de las tareas que se llevan a cabo desde este departamento.
Técnicas de la gestión de personal: esenciales para la cohesión empresarial
Los encargados de la gestión del personal deben tener una serie de habilidades que les hagan aptos para el trato con los trabajadores de la empresa. Así, hay una serie de técnicas con las que las relaciones con ellos mejoran sustancialmente y que, por ende, deberían incorporarse en las rutinas del departamento de gestión de personal:
- Liderar: no es suficiente con mantener reuniones periódicas en las que evaluar a los empleados, los objetivos y sus logros, sino que es necesario que los responsables de los diferentes departamentos, incluyendo Recursos Humanos, den ejemplo. Por este motivo, es esencial que estos profesionales sean los primeros en seguir las normas y cumplir con las tareas que su puesto de trabajo implica.
- Motivar: hacer críticas constructivas es algo que permite a los empleados mejorar en sus funciones, pero no basta con ello. Desde Recursos Humanos es imprescindible saber cómo motivar a los empleados para que estos sean más productivos y puedan desempeñar sus labores adecuadamente.
- Comunicar: todo empleado destinado a Recursos Humanos debe saber comunicarse correctamente, abiertamente y de una forma muy asertiva, sin dejar de lado la amabilidad y empatía.
- Diplomacia: la diplomacia es esencial para poder hacer frente a cualquier conflicto que pueda surgir en el entorno laboral. Por ello, es imprescindible que, una de las habilidades del responsable de gestión de personal sea la diplomacia y la facilidad de palabra.
Las técnicas que se pueden usar desde el departamento de Recursos Humanos para mejorar las relaciones entre empleados y responsables de áreas son muchas; por ello, es esencial que estos las conozcan bien y las apliquen en su día a día para mantener el capital humano cohesionado en beneficio de la empresa.
La gestión de personal es, sin duda alguna, una de las áreas más importantes en cualquier organización. Por ello, es imprescindible contar con la persona adecuada, quien debe poseer ciertas habilidades que le permitan desarrollar sus funciones correctamente.
¿Qué es y como funciona la gestión de personal?
Dentro del proceso de gestión de personal, podemos identificar estas fases:
- Plan: definir los objetivos estratégicos y el plan de personas.
- Selección: desarrollar un sistema eficaz para atraer a los candidatos adecuados que ayuden a alcanzar los objetivos.
- Acogida: establecer un plan de acogida adecuado para que las nuevas incorporaciones puedan conocer a fondo la empresa y las condiciones de trabajo.
- Expectativas: comunicar qué se espera de ellos a los empleados y establecer métricas de medición.
- Desarrollo: ofrecer posibilidades de crecimiento al empleado que le ayuden a mejorar su situación profesional.
- Evaluación: revisar junto al empleado sus competencias, identificar gaps y establecer las mejoras necesarias para alcanzar los objetivos.
- Formación: planificar formación continua para desarrollar el potencial del empleado.
- Soporte: ofrece herramientas que permitan al empleado comunicarse con la organización, su responsable y sus compañeros.
- Compensación: el refuerzo positivo permite que los empleados sientan que su esfuerzo merece la pena y les motiva a continuar por el mismo camino.
- Promoción: ofrece opciones de mejora profesional dentro de la compañía.